LAS AFICIONES
¡El mar!
La inmensidad del mar la hace soñar. El infinito del horitzonte le llena los
pulmones de libertad. Ha navegado por mares plácidos y por mares tempestuosos. Se ha sumergido en les profundidades marinas descubriendo paisajes insospechados. A Zeneida le gusta sentarse en la arena cerca de la ola tranquila. El mar de invierno le aporta paz espiritual. El mar de verano, la alegría de vivir.
¡La danza!
La danza es la expresión estética más sutil de un cuerpo en movimiento. Es ritmo y es escultura esculpida en el espacio. Es música hecha forma. Es sensualidad y belleza. En este dominio del cuerpo hecho obra de arte, Zeneida lee también volundad de superación, tenacidad del esfuerzo mantenido y rigor de la expressión formal. Estética, pasión y voluntad.
La danza es la expresión estética más sutil de un cuerpo en movimiento. Es ritmo y es escultura esculpida en el espacio. Es música hecha forma. Es sensualidad y belleza. En este dominio del cuerpo hecho obra de arte, Zeneida lee también volundad de superación, tenacidad del esfuerzo mantenido y rigor de la expressión formal. Estética, pasión y voluntad.
¡Los viajes!
Para Zeneida, el viaje en solitario es deseo de aventura y necesidad de mantener el espíritu despierto. Le gusta el viaje que se improvisa dia a dia, paso a paso, en busca de otras culturas, de otras gentes, de otros valores. Zeneida ve en el viaje un estímulo para la imaginación y un abanico abierto a nuevas costumbres y nuevos amigos que nos enriquecen como persona, nos hacen más tolerantes y más comprensivos.
Para Zeneida, el viaje en solitario es deseo de aventura y necesidad de mantener el espíritu despierto. Le gusta el viaje que se improvisa dia a dia, paso a paso, en busca de otras culturas, de otras gentes, de otros valores. Zeneida ve en el viaje un estímulo para la imaginación y un abanico abierto a nuevas costumbres y nuevos amigos que nos enriquecen como persona, nos hacen más tolerantes y más comprensivos.